Me hicieron esta pregunta el otro día y pensé que sería útil compartir las claves que normalmente me ayudan cuando no tengo claro qué camino tomar. Hay momentos en los que te falta la claridad, la energía o la motivación para avanzar en tu proyecto vital y está bien tener algunas herramientas a mano que te ayuden a conectar con la voz de tu corazón.
¡Aquí van!
Silencio
En primer lugar creo que es vital mencionar el silencio. Vivimos de forma muy acelerada y con muchos estímulos (ruidos, redes sociales, familia, vida social, compañeros, música etc). Solemos estar mucho en el hacer y en general hay pocos espacios de introspección donde puedas conectarte a tu voz interior y escuchar tu sabiduría. Y lo cierto es que es allí donde encontrarás todas las respuestas, y un lugar en el que reposar y recargarte en el Ser. Pero parece que uno pierda el tiempo si no hace nada. Al revés, sirve para reajustarte y reconectarte a tu GPS.
Naturaleza
El dar un paseo por el campo, por la playa o la montaña, o simplemente por el parque más cercano para mí un remedio mágico. Aunque a veces piense que salir en bicicleta por la montaña me hace perder mi precioso tiempo, siempre vuelvo recargada de nuevas energías, ideas, enfoques, proyectos o simplemente serenidad. Porque la naturaleza me acoge y me reconforta, recordándome que soy como ella: majestuosa, abundante y resiliente.
Meditar
Meditar siempre es como volver a casa. De nuevo reposar en el Ser y dejar de “hacer” por un ratito. Hay muchas técnicas y no tienes que ser un súper yogui y estar levitando dos horas. Para mi unos minutos al día ya me llevan a mi centro y me reconectan conmigo. Puedes empezar observando la respiración y con ese foco ya se va reduciendo la frecuencia de tus pensamientos. También me gusta combinarlo con las palabras del Ho´oponopono (“Lo siento, perdóname, te amo, gracias”) para calmar mi mente.
Disfrutar
Siempre fui de la escuela del sacrificio. Crecí pensando que lo disfrutar es un lujo (porque si quieres algo tienes que luchar mucho)… Y que en todo caso es para los domingos y no mucho que “es de vagos”. Sin embargo, con el tiempo he comprendido que disfrutar es vital acercarte a tu ser, ganar claridad, conectar con tu propósito y vibrar alto para atraer aquello que está en la misma sintonía (y avanzar en tus metas del corazón).
Con lo que te recomiendo que en tu agenda incluyas sí o sí, cada día un poquito de disfrute 😉
Descubre y conecta con aquello que hace tu corazón cantar y vibrar alto…. Lo que sea: pintar, bailar, ver a tus amigos, hacer deporte, mirar el mar, etc …. Desde esa vibración más alta se ve el mundo con otros ojos y es más fácil tomar decisiones desde el amor.
Preguntas poderosas
Hay muchas….Para mí una pregunta fundamental que siempre me recoloca la cabeza es:
-¿Quieres vivir /decidir desde el miedo o desde el amor? Esta siempre me da claridad.
También otras poderosas como:
-¿Qué harías si no tuvieras miedo?
-¿Qué harías si tuvieras todo el tiempo y el dinero del mundo?
-¿Qué haces en tu tiempo libre, qué lees, qué estudias, qué vídeos ves? ¿Qué es lo que más disfrutas, que pierdes el reloj de vista?
-¿Quién te inspira? ¿A quién admiras y por qué?
-¿Qué te encantaba hacer de niña? (Esto también te subirá de nuevo la vibración…)
Permiso para experimentar
En momentos de duda, cuando ya has analizado mucho todos los caminos y no llegas a ninguna conclusión, pues igual lo que te toca es darte permiso para experimentar uno y otro. Y así salir de dudas.
No nos gusta errar o “equivocarnos” pero a veces cabe probar aquellas opciones que más nos llaman para encontrar la que mejor nos va. Sin apego y con la inocencia de un niño que prueba. O aprenderemos o lograremos lo que queremos. No hay error ni fracasos, sólo experiencias 😉
Es más, atrévete a experimentar siguiendo los dictados de tu corazón aunque a nivel lógico te parezca “un disparate”. Olvídate de las críticas. El corazón es sabio y recuerda tu camino.
Y recuerda: tú eres mucho más que tus resultados.
(Si metes la pata en algún momento, pues pérdonate y fuera culpas, porque a cada paso lo haces lo mejor que sabes. Nada de fustigarte, trátate con amor como lo harías con tu mejor amigo).
Y aquí entra en juego un elemento importante:
Confiar en el proceso de la vida.
Igual que no todos los días sale el sol y a veces está nublado, nosotros tenemos temporadas con menos claridad y en las que te sientes más perdida. Pero siempre acaban pasando…
Con lo que es vital tener confianza en ti primero y en el fluir de la vida, en que hay un orden superior, una sabiduría detrás de tus acciones y que como en las pelis de Hollywood, todo saldrá bien (o al menos para tu bien mayor, la vida no quiere fastidiarte 😉
Como decía Steve Jobs en su discurso de Standfort, cuando miras atrás en tu vida ves que todos los puntos aunque parecieran torpes se unen para formar un tapiz perfecto y te llevan a lo que eres hoy. Aún detrás del caos aparente, todo es perfecto.
Autocuidado
En último lugar pero tendría que estar al principio…A veces es que simplemente estás cansada, y necesitas recargar pilas. Te has vaciado de tanto dar y mirar fuera y lo que te toca es cuidarte. Centrarte en ti, mimarte y poner tus necesidades por delante. Cosas tan elementales como dormir lo suficiente, comer bien, hacer deporte y en general, todo aquello que apoya tu bienestar. Así cargas pilas y puedes ver la vida con otro color.
Además, cuando te cuidas le dices a la vida que “yo soy importante, yo soy valiosa, yo me amo”, y la vida responde con esa misma actitud.
….
Hasta aquí las estrategias para conectarte a tu GPS, espero que te sirva… Y ahora te toca a ti…. ¿Qué te llevas de este post? ¿Qué otras herramientas te ayudan a reconectarte? Compártelas a continuación, y así sumamos, muchas gracias de antemano…. ¡te espero!
Un abrazo
Cristina
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